Ecosistemas secos, humedales de la Región Andina y bosques secos de la Región Caribe, entre los más amenazados del país según la Lista Roja de Ecosistemas de Colombia
Con el apoyo del Instituto de Investigación de Recursos Biológicos Alexander von Humboldt, Invemar, el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, y la ejecución de la Pontificia Universidad Javeriana y Conservación Internacional, se presentó recientemente la primera versión de la Lista Roja de Ecosistemas Terrestres de Colombia-LRE
Según el informe, de los 81 ecosistemas reconocidos en el país para este análisis, el 22% se encuentra en estado crítico (CR), el 21% en estado de peligro (EN) y un 42% están catalogados con niveles de afectación mínima (LC). Según las cifras, los ecosistemas más amenazados corresponden a los ecosistemas secos y humedales de la Región Andina y los bosques secos de la Región Caribe.
Actualmente la primera versión de la categorización de LRE se desarrolló para ecosistemas terrestres y en una segunda fase deberán incluirse los ecosistemas marinos.
El proceso se basó en el uso de los criterios y categorías desarrollados por la Unión para la Conservación de la Naturaleza (IUCN), los cuales buscan evaluar el grado de transformación de los ecosistemas. Esta evaluación mantiene las mismas categorías usadas en las listas rojas de especies: que corresponde a CR, riesgo crítico, EN, en peligro, VU, vulnerable, pero para este caso, la categoría de Extinta, fue reemplazada por la categoría en “Colapso” para los ecosistemas.
Colombia es el primer país en el mundo en aplicar estos criterios en todos sus ecosistemas, hasta el momento la evaluación se había realizado en algunos ecosistemas alrededor del mundo pero nunca a un país completo.
Como resultado de este ejercicio exploratorio, se generó un avance en el mapa de ecosistemas amenazados, el cual es un insumo para la agenda de investigación en biodiversidad del país. Con esta visión a nivel de ecosistemas, se pueden integrar los objetivos de investigación de diferentes disciplinas del conocimiento sobre biodiversidad. Adicionalmente, los resultados de esta primera versión de ecosistemas amenazados, suministra información de las áreas que están sometidas a un proceso mayor de transformación, lo cual debe ser el foco de atención no solo para investigadores, sino para los tomadores de decisiones que deberán considerar estas áreas como prioritarias para la conservación.
Este ejercicio, desarrollado por investigadores de la Universidad Javeriana y Conservación Internacional, con el apoyo del Instituto Humboldt, Invemar y el Ministerio de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible, brinda insumos para la delimitación de áreas de conservación y ordenamiento del territorio.