
En busca de los delfines rosados y nutrias gigantes del Meta
Dos de las especies más emblemáticas de Colombia serán estudiadas en el municipio de Puerto Gaitán. Fotos: Mónica Morales (Instituto Humboldt) y Fernando Trujillo (Fundación Omacha).
- • El Instituto Humboldt y Cormacarena realizarán dos expediciones por la cuenca del río Tillavá, hábitat de estos emblemáticos mamíferos.
- • El propósito de esta alianza es realizar un estudio sobre las poblaciones de estas especies y sus interrelaciones con otros organismos y ecosistemas acuáticos como los humedales.
- • Entre el 14 y 23 de abril, más de 20 investigadores del Humboldt y personas de la comunidad estarán en la zona para empezar a identificar la presencia y estado de conservación de la biodiversidad acuática.
- • Este trabajo, que durará aproximadamente nueve meses, contará con el apoyo de la Fundación Omacha, experta en el estudio de delfines y nutrias en Colombia.
Con cerca de 520 especies registradas, de las cuales 58 son endémicas, Colombia está catalogado como el sexto país en el mundo con mayor representación de mamíferos, animales que habitan en diversos ecosistemas como las densas selvas húmedas, bosques andinos y secos, sabanas, humedales e incluso mares.
Sin embargo, este tesoro biodiverso palidece a pasos agigantados debido a las actividades impulsadas por el hombre, como la deforestación, cacería indiscriminada, pérdida y transformación de los hábitats naturales para la agricultura y ganadería y minería ilegal, acciones que detonan el cambio climático.
Según el Sistema de Información sobre Biodiversidad de Colombia (SiB), más de 42 especies de mamíferos ya corren un alto riesgo de desaparecer en el territorio nacional: seis están en peligro crítico, ocho en peligro y 24 son vulnerables a la extinción. Sumando a esto, 103 especies están listadas en los apéndices Cites por el grado de amenaza generado por el comercio.
El delfín rosado, un mamífero que alcanza a medir hasta 2,8 metros de largo, se ha visto fuertemente impactado por las actividades antrópicas. Foto: cortesía Fernando Trujillo (Fundación Omacha).
El delfín rosado (Inia geoffrensis) y la nutria gigante (Pteronura brasiliensis), dos de los animales más carismáticos y emblemáticos que habitan en varios de los ecosistemas acuáticos más representativos del país, hacen parte de los listados de mamíferos amenazados por causa de la mano del hombre.
Los pescadores figuran entre los principales verdugos del delfín rosado en Colombia, un mamífero que alcanza a medir hasta 2,8 metros de largo y pesar más de 220 kilos. Según la Fundación Omacha, estos animales son atrapados en los ríos por medio de mallas de monofilamento, cacería o envenenamiento, “debido a que los pescadores lo conciben como una fuerte competencia para el recurso pesquero”.
Por su parte, las nutrias gigantes, con tamaños entre los 1,5 y 2 metros de longitud, han recibido golpes contundentes por parte de los cazadores, una hecatombe que tuvo su auge a mediados del siglo pasado para comercializar sus pieles en el mercado internacional.
“Estas nutrias fueron cazadas intensamente entre 1940 y 1970, por lo cual la cacería figura como la causa más importante de la gran disminución de la especie. Además, en sitios como el río Mirití Paraná (Amazonas) y la parte media del río Meta (Orinoco), los pescadores las consideran una seria competencia por el consumo de peces, y en Vichada se presenta el mercado ilegal de venta de crías como mascotas”, informó Omacha.
Las nutrias gigantes han recibido impactos por parte de cazadores y la degradación de sus hábitats. Foto: Mónica Morales (Instituto Humboldt).Omacha).
Estudiar para conservar
El departamento del Meta, un hervidero de biodiversidad que alberga ecosistemas amazónicos, andinos y de la Orinoquia, representa uno de los principales hogares para las nutrias gigantes y delfines rosados.
Ante esto, el Instituto Humboldt y la Corporación para el Desarrollo Sostenible de la Macarena (Cormacarena) decidieron unir esfuerzos para estudiar las poblaciones de estos mamíferos en la cuenca del río Tillavá.
A través de un convenio, que durará aproximadamente nueve meses de este año, las entidades aunarán esfuerzos técnicos, científicos y financieros para dar marcha a un estudio de estas especies, además de sus interrelaciones con los otros recursos hidrobiológicos y humedales de la zona.
Los expertos elaborarán un documento detallado sobre el estado del delfín rosado y la nutria en la cuenca. Video: Mónica Morales (Instituto Humboldt).